Hoy en día, todos los niños y niñas utilizan dispositivos electrónicos ya sea en su tiempo libre, como herramienta para comunicarse con los demás o para acceder a recursos educativos y buscar información.

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En general, las conclusiones de las entrevistas realizadas coinciden en que emplean mucho tiempo delante de las pantallas. Asimismo, en ocasiones no se establecen tiempos de uso por lo que puede llegar a tener efectos negativos sobre su comportamiento o habilidades sociales. Es importante destacar que son muchas las familias que utilizan el teléfono móvil como incentivo de un buen comportamiento o resultado académico.

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Para mi sorpresa, todavía continúa existiendo la brecha digital. Son muchas las familias que pueden tener un dispositivo electrónico en el hogar, pero no disponen de portátiles, ordenadores o tablets para cada uno de los miembros de la familia por lo que tienen que compartir constantemente; lo cual en ocasiones puede hacerse incompatible ya sea por los horarios preestablecidos o por falta de infraestructura tecnológica en el hogar.

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En conclusión, queda mucho por trabajar y hacer en este ámbito de las tecnologías. Sin lugar a duda, todo se puede aprender y enseñar mediante la educación tanto de adultos como de niños. Por tanto, es crucial tener en cuenta esta gran herramienta que ayudará a un mejor desarrollo y utilización de los dispositivos electrónicos en esta nueva sociedad digital.